El Real Madrid dio un paso firme en su camino hacia la fase de grupos de la Women’s Champions League tras imponerse por 1-2 al Eintracht Frankfurt en Alemania. El conjunto de Pau Quesada ofreció una primera parte de gran nivel, en la que logró los dos tantos que le permiten afrontar con ventaja la vuelta de la eliminatoria en el Alfredo Di Stéfano.
El encuentro comenzó con un Real Madrid muy concentrado y solidario en todas las líneas. Con una presión alta y un bloque bien armado, las blancas supieron neutralizar las virtudes del Eintracht y aprovechar con eficacia sus llegadas. El primer golpe llegó pronto, en el minuto 13, cuando Linda Caicedo culminó una contra con un disparo al larguero. El rechace lo recogió Angeldahl, que desde la frontal sacó un potente disparo imposible para la guardameta alemana. El tanto asentó todavía más al equipo, que continuó manejando los tiempos y demostrando solidez atrás.
La recompensa a ese dominio llegó en el minuto 35. Signe Bruun, con un giro dentro del área y una zurda precisa, firmó el 0-2. El Real Madrid parecía tener controlado el choque, pero justo antes del descanso, Anyomi recortó distancias de cabeza, dando vida al conjunto local.
En la segunda mitad, el Eintracht intentó dar un paso adelante, empujado por su afición. Sin embargo, el Madrid supo resistir con oficio. La seguridad defensiva fue clave, sostenida por el esfuerzo colectivo y por una Frohms decisiva en los momentos críticos, con intervenciones de mérito ante Gräwe y Memeti. Quesada rotó con los cinco cambios para mantener el nivel físico y la concentración, y el equipo respondió. Linda Caicedo y de nuevo Bruun pudieron sentenciar en los minutos finales, aunque la madera y la guardameta rival lo evitaron.
Imagen de portada vía Real Madrid CF
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