La selección española femenina ha hecho historia al alcanzar por primera vez las semifinales de la Eurocopa tras imponerse a Suiza por 2-0 en un encuentro intenso, físico y marcado por la paciencia y el oficio. España, vigente campeona del mundo, supo reponerse a un inicio incómodo y a varios contratiempos para cerrar un triunfo de carácter. Fueron capaces de romper la maldición de los cuartos de final y seguirán soñando en el torneo.
Suiza entró mejor al partido de lo que se podría pronosticar al estar arropados por miles de aficionados, presionando arriba y dificultando la salida del balón española. Con un ritmo alto y mucha agresividad en los duelos, logró incomodar a las jugadoras españolas durante gran parte de la primera mitad. En ese contexto, Sydney Schertenleib fue la jugadora más desequilibrante para el conjunto helvético, liderando las acciones ofensivas. España dominada en la posesión, pero no era capaz de crear oportunidades claras con el paso de los minutos.
España, a pesar de no mostrarse especialmente inspirada durante varios tramos del partido, logró asumir el control del balón con el paso de los minutos y cada vez generar más acciones con clarividencia. Una acción de Mariona Caldentey dentro del área provocó un penalti, pero la propia jugadora erró el lanzamiento, desaprovechando una clara ocasión de adelantarse y tocó seguir remando para llegar a la orilla. El primer tiempo finalizó con una sensación de frustración para las españolas, agravada por un remate de cabeza de Irene Paredes que se estrelló en el poste justo antes del descanso. Se palpaba la preocupación en el aire porque en cualquier momento el juego de Suiza podía materializar un tanto.
La reacción llegó tras el paso por vestuarios. Los cambios impulsaron al equipo, especialmente con la entrada de Athenea del Castillo que se ha convertido en la mejor revulsiva en la plantilla de España. La delantera del Real Madrid aprovechó una brillante asistencia de tacón de Aitana Bonmatí para abrir el marcador con un remate raso que lo cambió absolutamente todo.
La sentencia la firmó Claudia Pina con un potente disparo desde la frontal, que ya es una marca registrada de la casa. La atacante del Barça continúa mostrando su madurez competitiva y su capacidad de decidir partidos con acciones diferenciales, continuando con un momento tan dulce. Aunque Alexia Putellas erró otro penalti en los minutos finales, España no lo necesitó. La clasificación ya estaba asegurada.
Se dio la extraña curiosidad de que las principales candidatas al Balón de Oro, Alexia y Mariona, fallaron un penalti cada una en el mismo partido. Pero eso no impidió que España pudiera imponerse por 2-0 y verse en una semifinales que son históricas para el combinado nacional.
La Selección campeona del mundo tenía una deuda pendiente con la Eurocopa, y por fin han conseguido romper los límites que les había marcado la historia. Ahora el equipo que ha hecho soñar a un país durante mucho tiempo, tiene la oportunidad de lograr otro hito que siga aumentando su leyenda con Aitana Bonmatí siendo la MVP de un partido que ya quedará marcado para siempre.
Imagen de portada vía UEFA Women’s EURO 2025
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