Llegó el día. Llegó la hora. La final de la Champions League dio comienzo en Lisboa con el Fútbol Club Barcelona y el Arsenal enfrentándose en busca de sumar el mayor trofeo europeo a sus vitrinas en esta temporada 2024-25.
Ambos equipos se plantaron sobre el césped de la ciudad portuguesa con mucho por ganar, pero también con mucho por perder. Los nervios y la tensión se notaban en el ambiente, y con el paso de los minutos todo seguía igual que cuando sonó el pitido inicial.
A los 30 minutos ya se había vivido de todo, incluso un gol que de primeras subió al marcador a favor de Arsenal con un balón que entró en la portería blaugrana después de que tuviera un error Irene Paredes. Aunque un fuera de juego señalado desde el VAR volvió el 0-0 al marcador y el mismo escenario que se fue repitiendo durante la primera parte, pero cada vez con menos tiempo para dar el primer golpe encima de la mesa.
La primera parte, con un único minuto de tiempo añadido, llegó con el empate en el electrónico. El trono de Europa se iba a disputar en tan solo 45 minutos, y con la sensación de que se iba a medir todo en pequeños detalles. por la igualdad mostrada entre ambos conjuntos.
El primer cuarto de hora de la segunda parte fue cuando empezó a verse al verdadero Barça y desplegaron sobre el verde todo lo que están acostumbradas a hacer desde hace años. El descanso le vino bien a un equipo que estaba con dudas y nervios, y pudieron encontrar su mejor versión con varias acciones que pusieron en problemas a la defensa del club londinense.
Aunque el fútbol tuvo cosas del fútbol. En el mejor momento del Barça aparecieron problemas físicos de Mapi León y Patri Guijarro, lo que aprovechó el Arsenal para ponerse por delante con gol de Stina Blackstenius en el minuto 74.
Después del gol del Arsenal, el Barça lo intentó pero sin claridad. Terminaron el partido con el doble de tiros que el equipo inglés, pero con menos el Arsenal fue capaz de que un balón acabe en el fondo de las redes y con eso volver a sentarse en el trono europeo.
El gol de Blackstenius entra directamente en la historia del fútbol y en concreto en la del Arsenal, que tras 18 años logró volver a salir campeón de la Champions ante un rival que está marcando una época como el Barcelona.
Imagen de portada vía UEFA Women’s Champions League
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