El FC Barcelona femenino ha arrancado la temporada con paso firme y con una goleada memorable en San Mamés con un 1-8 en el electrónico, pero más allá del resultado, una de las grandes conclusiones del inicio de curso es la importancia que está adquiriendo Vicky López en el esquema de Pere Romeu, en la que puede ser una de las temporadas clave en su carrera. Con una plantilla más corta que en temporadas anteriores y un calendario exigente entre Liga y Champions, la joven centrocampista está llamada a convertirse en una de las protagonistas del año y dar un paso adelante.
La futbolista de 19 años fue una de las figuras destacadas en la victoria frente al Athletic. Abrió el marcador tras una acción de Salma Paralluelo y cerró la goleada con un doblete que reflejó su capacidad para llegar desde segunda línea y aprovechar cada oportunidad. Su actuación no solo fue importante en el resultado, sino que confirmó la madurez con la que afronta partidos de máxima exigencia como es jugar en un estadio ante más de 11.000 personas y contra un equipo mítico de la competición.
La gestión de recursos es uno de los grandes retos de Pere Romeu esta temporada y una de las claves va a ser López. La plantilla del Barça ha quedado algo más ajustada en número, lo que obliga a repartir esfuerzos con precisión. En ese contexto, el protagonismo de Vicky se multiplica y en algunos casos será la encargada de hacer el trabajo de Alexia Putellas o Aitana Bonmatí cuando estas descansen. Su polivalencia, combinando calidad técnica, visión de juego y llegada al área con facilidad, la convierte en una futbolista indispensable para dar aire fresco al equipo en una línea en la que el desgaste es continuo y hacen falta piernas todo el tiempo.
La confianza depositada en ella no es nueva. Desde su debut con el primer equipo, Vicky ha demostrado una capacidad poco común para adaptarse a la exigencia del Barça y demostrar que es una de las jugadoras más talentosas del mundo a su edad. Sin embargo, esta temporada supone un punto de inflexión ya no se trata solo de ser una promesa, sino de dar un paso adelante y consolidarse como titular habitual en un conjunto que aspira a todos los títulos. Tiene potencial de estrella, y esta es la temporada en la que de verdad tiene que demostrarlo con regularidad.
La propia dinámica del club invita a pensar que Vicky tendrá muchos minutos y se da el escenario perfecto para ella. La necesidad de rotaciones y la obligación de mantener la frescura competitiva en dos frentes hacen de su figura un pilar para el equilibrio del equipo y una de las que tiene que asumir responsabilidad continuamente para que las más veteranas lleguen frescas al tramo final del curso. Lo demostrado en Bilbao es un aviso de lo que puede ofrecer a lo largo de la campaña, que son goles, inteligencia táctica para romper líneas y personalidad en los momentos decisivos generando peligro con su magia.
Con apenas 19 años, Vicky López encara una temporada clave y puede que haya un antes y un después para ella. En un Barça de plantilla corta, su importancia será una de las claves para sostener la ambición de un equipo que busca revalidar la Liga F Moeve y volver a luchar por el trono europeo que se les escapó en la final de la 2024-25 contra el Arsenal.
Por otra parte, Vicky tiene un factor especial que sumado a tu talento le da potencial de superestrella. Es una jugadora que conecta muy bien con el público y que va sobrada de carisma, por lo que su impacto puede trascender de las líneas del campo. Ya se ha visto cómo se está convirtiendo en una de las favoritas de la afición, y no es cualidad, sino que López lo tiene todo para consolidarse como una de las referencias de la Liga F y de la Champions League en un futuro no muy lejano.
Imagen de portada vía Fútbol Club Barcelona
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