Llegó el gran momento. 40 minutos que decidirían al mejor equipo de la competición más importante del continente. USK Praga y CBK Mersin medían sus fuerzas para estar en lo más alto en esta edición de la EuroLeague.
Un partido que a priori parecía igualado, con el paso de los minutos mostró la superioridad del equipo checo. Además, con la gran noticia de que tanto Maite Cazorla con Praga como María Araújo con Mersin pudieron saltar a la cancha.
El equipo de Praga estaba dominando, llegando a ir 15 puntos por encima unos minutos antes de que llegara el ecuador del encuentro. Las grandes protagonistas estaban siendo Valeriane Ayayi y Brionna Jones, que liderabana las suyas en ataque y parecían imparables. Al descanso, llevaban 30 de los 42 puntos de su equipo.
En el tercer cuarto, Cukurova llegó a poner el partido igualado pese al gran nivel y distancia que sacó Praga en el primer tiempo, pero los minutos finales del periodo fueron a favor del conjunto checo. Por lo que llegaron al último asalto con el viento a favor.
El tiempo fue pasando, y el USK de Maite y María Conde se pudo proclamar campeón de la máxima competición del continente. El gran impacto de Brionna Jones, que fue nombrada la MVP de la Final Six de la EuroLeague, fue fundamental para que las dos jugadoras españolas pudieran subirse a lo alto del podio.
Una década después, el Praga vuelve a lo más alto y consigue ganar la segunda EuroLeague de su historia. La primera fue con Laia Palau y ahora con las dos estrellas de la Selección actual. El equipo checo mantiene su conexión con el baloncesto español.
Imagen de portada vía FIBA
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