Después de más de un año y medio de ausencia por una grave lesión en el ligamento cruzado anterior, Sam Kerr volvió a vestirse de corto con el Chelsea. Y lo hizo de la forma que mejor la define, recordando al mundo que es una leyenda en activo y marcando goles.
La delantera australiana, símbolo de las Blues, capitana de su selección y seguramente una de las más grandes de la historia, reapareció en Villa Park en el triunfo por 3-1 frente al Aston Villa, sellando el marcador en el tiempo añadido con el tanto que supuso, además, su gol número 100 con el club londinense que aumenta su legado en el club.
En el minuto 75 llegó el momento más esperado por todos los seguidores del fútbol, porque Kerr ingresó al campo en sustitución de Johanna Rytting Kaneryd. Quince minutos después, aprovechó un balón en el área para rematar y devolver la sonrisa a su equipo, a la afición y al mundo de la pelota. Es una superestrella a la que siempre se le extraña cuando no juega.
“Marcar 100 goles con cualquier club es increíble, pero hacerlo con el Chelsea es algo de lo que estoy muy orgullosa y no lo tomo a la ligera”, declaró tras el partido y volver a brillar como siempre lo ha hecho. El logro, alcanzado en 128 encuentros, refuerza su papel como una de las delanteras más determinantes del panorama internacional a pesar de llevar tanto tiempo inactiva.
Para Kerr, el gol que subió al electrónico significó más que una estadística: “Soy goleadora, es lo que me encanta hacer. Esos 100 goles representan mucho trabajo, dedicación y sacrificios”.
La entrenadora Sonia Bompastor, que vivía su primer partido oficial con Kerr a sus órdenes, subrayó la trascendencia de este regreso y un momento que marca la historia: “Me alegró mucho que pudiera jugar 20 minutos y aún más que marcara. Eso le quita presión y le dará confianza. Lo que Sam representa para este club es enorme. Para mí, es una ídola«.
Con 32 años recién cumplidos, Kerr suma ya 17 títulos colectivos en su carrera, de los cuales 11 llegaron con el Chelsea desde su fichaje en 2020. Entre ellos, figuran cinco títulos consecutivos de la Women’s Super League, tres FA Cup y cuatro Copas de la Liga. Su nombre también ocupa un lugar especial en la historia de la selección australiana: es su máxima goleadora histórica, con 69 tantos, por encima de Tim Cahill, leyenda del país.
«Eres una inspiración a nivel mundial y yo soy uno de tus mayores seguidores y siempre estoy aquí para ti dentro y fuera del campo. Sigue batiendo récords y, lo más importante, disfruta del viaje«. Fueron las palabras de Cahill cuando le superó en goles con la selección.
La trayectoria de Kerr la convierte en una figura única e irrepetible. Es la única jugadora en haber conquistado la Bota de Oro en tres continentes diferentes tras lograrlo en Australia, Estados Unidos y Europa.
El gol en Villa Park simboliza un nuevo comienzo tras la adversidad y una lesión complicada. Kerr no solo regresó para cumplir con las expectativas tan altas que siempre tiene encima, sino para recordarle al fútbol por qué su nombre se ha convertido en sinónimo de competitividad, eficacia y una de las más grandes. Su reaparición refuerza al Chelsea en el inicio de la temporada y devuelve al mundo del fútbol a una de sus grandes protagonistas. Es el comienzo de una nueva era.
Imagen de portada vía Chelsea FC
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