
El apodo de “La Reina” que acompaña a Alexia Putellas no es una etiqueta vacía ni una simple estrategia de marketing. Es, más bien, el reflejo de una trayectoria que ha trascendido el terreno de juego para convertirse en un símbolo de liderazgo, excelencia y constancia dentro y fuera del fútbol. Una figura que ha hecho que el fútbol femenino crezca, llegue a más gente y demuestre que es un deporte con un techo muy alto.
Desde que ganó el Balón de Oro en 2021, Alexia se consolidó como una referencia mundial. Aquella distinción, que la primera en la historia para una futbolista española, la situó en un espacio reservado a las leyendas y empezó a aumentar su prestigio a nivel histórico de una forma inmediata. Nike, su patrocinador, resumió ese estatus con un mensaje tan breve como elocuente, que posteriormente quedaría como el apodo de Putellas. “Alexia XI. La Reina» fue la publicación de la marca deportiva que empezó a hacer que en el imaginario colectivo se quedara ese apodo de vincular a Alexia con la realeza. P
ero la expresión no nació en una campaña publicitaria, ya que se conoce que surgió antes, en su propio entorno, donde sus compañeras y rivales reconocen en ella una figura de autoridad natural y una personalidad única, especial e irremplazable.
En el vestuario del FC Barcelona y de la Selección Española, “La Reina” es sinónimo de respeto hacia una jugadora que cambió el paradigma del fútbol. Putellas lidera con un estilo que muchas veces es silencioso pero siempre firme, basado en el ejemplo y en transmitir su energía al resto. No necesita elevar la voz para influir. Su manera de entrenar, competir y asumir la responsabilidad en los momentos decisivos la convierten en una referente y un icono que trasciende el campo. Como dijo Patri Guijarro, una de sus compañeras más cercanas y de las que más ha jugado con ella, “es la reina del fútbol. Ha sido la líder tanto del Barça como de la Selección, y se merece todo lo que ha conseguido”.
Ese reconocimiento trasciende lo deportivo. Alexia se ha convertido en una voz influyente en la sociedad, especialmente entre las nuevas generaciones de niñas que la ven como un modelo de esfuerzo y determinación, y lo que muchas quieren ser de mayores. Su impacto inspira a una nueva era del fútbol femenino, más visible, más profesional y más ambicioso, y con muchas niñas que tienen un ícono al que admirar y un camino que intentar recorrer para seguir los pasos de «La Reina».
Como resumió en su momento Leila Ouahabi tras el Balón de Oro: “es un premio merecido por todo el trabajo que llevas detrás”. Mientras que en ese momento ya se veía a jóvenes promesas como Bruna Vilamala, llamadas a seguir sus pasos, usando la palabra «inspiración» para hablar de Alexia.
Por su talento, su liderazgo y su ejemplo, Alexia Putellas no solo ha conquistado títulos, también ha conquistado un título simbólico dado por compañeras, rivales y fans que la llaman “La Reina”.
Imagen de portada vía RFEF
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